¿Existe tratamiento para la hernia discal? Por supuesto que sí. Pero, antes es conveniente conocer algunas claves que ayudan a identificar esta afección, pues se tiende a confundir con otros padecimientos. Son varios los casos en los que se puede pensar que se está padeciendo de una contractura o sobrecarga muscular, cuando en realidad es que se trata de una hernia discal.
Principales causas de la hernia discal
La hernia discal es una afección a nivel de la columna vertebral que puede aparecer cuando el material gelatinoso del disco intervertebral se sale o se desplaza y hace presión a los nervios cercanos. A pesar de que a través de algunas claves es posible reconocer cuando se trata de este padecimiento, lo recomendable siempre es acudir a un especialista certificado.
Así, es posible realizar una valoración precisa y determinar posibles daños y contemplar el tratamiento adecuado para la hernia discal. Estas son algunas causas posibles que provocan esta patología:
Lesiones y traumatismos
Una caída, lesión deportiva o un accidente de auto, puede llegar a generar una hernia discal al provocar presión sobre los discos intervertebrales.
Degeneración discal
Mientras avanza la edad, los discos intervertebrales pueden ir perdiendo su nivel de resistencia y elasticidad, volviéndose más propensos a desarrollar hernias.
Malas posturas y debilidad muscular
Conservar una postura de forma incorrecta durante un período de tiempo extensos de tiempo, sobre todo, el sentarse o levantar objetos pesados, puede provocar presión adicional a nivel de los discos.
Además, puede generar la debilidad de los músculos de la espalda y el abdomen, llegando a incrementar el estrés en los discos.
Sobreesfuerzo y movimientos repetitivos
Levantar objetos pesados incorrectamente o realizar movimientos que sean repetitivos donde se involucre torsión o flexión excesiva de la columna vertebral, puede incrementar el riesgo de padecer de hernia de disco.
Estilo de vida sedentario
La ausencia de actividad física regular y el debilitamiento de los huesos a nivel de la espalda, puede incrementar, en gran medida, el hecho de padecer de hernia de disco.
Factores genéticos
Algunos pacientes pueden tener predisposición genética para desarrollar dificultad o padecimientos a nivel de los discos intervertebrales, lo que puede incrementar el riesgo de padecer esta patología.
¿Cómo se sabe si padezco de hernia discal?
Cuando se va a realizar el diagnóstico preciso, el tipo de dolor permite tener una idea de que pueda tratarse de una hernia de disco. Una señal de alerta, en estos casos, es si el dolor está acompañado de una pérdida de fuerza en el pie o una alteración a nivel de micción. En pocas palabras, si se escapa la orina o se debe hacer más fuerza de lo normal para poder orinar, entonces, se estaría tratando de esta patología y se debe consultar inmediatamente a una clínica del dolor en Puebla.
¿Cómo se puede atender una hernia discal?
Ya que se ha realizado un diagnóstico oportuno y conforme al grado de la hernia, entre los tratamientos para hernia de disco más comunes, se pueden encontrar algunos como son:
Fármacos
Para iniciar con el tratamiento médico, los especialistas pueden recomendar el uso de corticoides. En caso de que el tratamiento con medicamentos no funcione, es posible que se haga la solicitud de una resonancia magnética y una valoración más profunda.
Además, se puede optar por un reposo indicado durante 48 y 72 horas, después intentar caminar o estar sentado. Y si el dolor no permite realizar estas actividades, entonces, será motivo por el cual se debe acudir al médico para considerar otras medidas.
Cirugía
El tratamiento para hernia discal con microcirugía debe estar contemplado según las condiciones de cada paciente. Si el tratamiento con medicamentos no permite conseguir una mejora del dolor y las molestias son graves, entonces, el especialista de columna, tendrá que valorar, si es necesario, una cirugía de hernia de disco para tratar adecuadamente con la afección.
Recuperación de la cirugía
Esta recuperación es de un día aproximadamente, sobre todo, si no surgen complicaciones. A medida que transcurren las horas tras la cirugía, el paciente puede llegar a sentarse y caminar nuevamente.
La rehabilitación es fundamental para conseguir restablecer la salud y funcionalidad de la columna vertebral. En este caso, el ejercicio tiene un papel esencial para este fin. Pues, ayuda a fortalecer los músculos circundantes, mejorar el nivel de flexibilidad y disminuir el riesgo de futuras complicaciones.
Al respecto, el ejercicio para hernia discal adaptado según las necesidades de los pacientes es considerado como un buen aliado en el trayecto hacia la recuperación luego de la cirugía.
Acude a Clínica del Dolor en Puebla para tratamiento para hernia discal
La Clínica del Dolor de Puebla cuenta con expertos como la Dra. Mónica Domínguez, es especialista en intervencionismo de mínima invasión en dolor y cuidados paliativos en Puebla. Una atención profesional que se puede conseguir para recibir tratamiento sin cirugía para control de dolor en rodilla, columna y cadera, según las condiciones de cada paciente.
Si buscas una valoración especializada de tratamiento para hernia discal, entonces puedes acudir a nuestro centro médico. Te invitamos a contactarnos a través del correo electrónico drmonica@clinicadeldolorpuebla.com.mx o mediante la línea telefónica (222) 290 7751.